Noche de Reyes

Hola,

Noche de Reyes. No nos vemos desde antes de que yo me fuera a Londres y me muero de ganas de verla. Quedamos en el Supersonic y entramos sin pagar. Ella se mueve como pez en el agua, saludando a todo el mundo. Tengo la sensación de que todas las miradas se fijan en Ella pero puede que sea porque soy una pequeña obsesa. También ha venido Rubén, que parece alegrarse de verme. Bailamos y bebemos con mucho contacto físico. En mi cabeza revolotea la idea de que me debe una noche, de que me debe mi regalo de reyes. Se lo digo y me dice que sí, que me lo debe. A las dos y media digo que he perdido las llaves de casa y que no tengo dónde quedarme. Ella me ofrece la suya y Rubén está de acuerdo pero contesto que no me gustan los sofás, que siempre me despierto con el cuello dolorido. "No es problema, la cama es grande", me dice. Rubén grita entusiasmado que se pide el centro. Le digo que despierte de su sueño.

Ya en su casa intentamos darle tiempo para que se meta en la cama sin esperarnos pero no parece muy por la labor. Finalmente nos acostamos los tres. Ella en el medio y Rubén y yo a los lados. Rubén tiene grandes expectativas pero Ella le corta en seco. Llevan mes y medio sin follar y no va a ser precisamente esa noche cuando se rompa la racha. Estirada en la cama y mirando al techo deseo que le plante ya. A los cinco minutos la respiración de Rubén se hace más pesada. A los seis comienza a roncar sin tapujos. A los siete Ella me viene a buscar y me encuentra. Me tapa la boca y le muerdo los dedos. Apenas nos movemos. Estamos un poco pedo, eso hace que no tengamos demasiado miedo. Pasado un rato nos levantamos al baño. Después llega el amor y nos tumbamos la una frente a la otra, acariciándonos el pelo y mirándonos en la oscuridad. Le susurro que la cosa no puede seguir así y nos besamos. Ella me da la razón. Dormimos abrazadas y nos despertamos del mismo modo. Rubén nos dice que si alguien se entera de que ha dormido con dos mujeres y ha desaprovechado la situación será un hazmerreír. Ella promete mantener el secreto, yo no.

Besos.

Beta