viernes, 11 de mayo de 2012

Cien latinos

Hola,

El lunes estuve en La Casa de América. Una amiga me dijo que iban a entregar unos premios y que después habría un cóctel. Como no ando bien de pasta me pareció una buena opción para emborracharme. El acto en cuestión consistiría en premiar a cien latinoamericanos de "destacada trayectoria" que residieran en Madrid. Mi amiga, incomprensiblemente, era una de las cien elegidas pero los otros noventa y nueve eran, para nosotras, una incógnita. Fuimos de las primeras en llegar, el auditorio es bastante pequeño y si a cada uno de los premiados le daba por llevar un par de acompañantes habría bofetadas por hacerse con una silla. Unas filas delante nuestro estaba Alaska, posiblemente buscando argumentos para la tercera temporada de Alaska y Mario. Sobre una enorme pantalla iban proyectándose las fotos de los homenajeados y fue así como supimos que Vargas Llosa, Di Estéfano, Héctor Alterio, Carlos Baute y Ariel Rot también formaban parte de los elegidos. Estaba anunciado que el acto contaría con la presencia de Esperanza Aguirre que, desde que inaugura Mercadonas, se apunta a un bombardeo.

Poco a poco el auditorio se fue llenando hasta que no cupo un alfiler. Vimos llegar a Carmen Posadas y a Vladimir Cruz, el de Fresa y chocolate. Finalmente una tía vestida de rosa se hizo con el micrófono y comenzó el acto sin rastro de Vargas Llosa ni de Espe. Tomaron la palabra un par de tipos con traje y finalmente le llegó el turno al Consejero de Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid. Confirmado: Aguirre no viene. Supongo que preguntaría si iba a ir Vargas Llosa y, al saber que no, debió pensar que mejor mantenerse alejada de tanto sudaca no fuera a ser que a alguien le diera por meterle la mano en el bolso. Ni Alterio, ni Di Estéfano, ni Baute ni Ariel Rot, solo Carmen Posadas y Alaska con cara de dónde nos hemos metido. El consejero subió al escenario y sus primeras palabras fueron "Con los focos no se ve nada". Pura campechanía. "Cuánta gente ha venío y qué bien que nos lo vamos a pasar. Que yo soy de Asuntos Sociales, que estoy acostumbrado a tratar con gente como vosotros. Que mu bonico el libro que habéis hecho. Que no me lo he leído pero he mirao las fotos. Que yo no creo que seáis unos animalicos que haiga que domesticar, como dicen algunos, pero que la tarjeta sanitaria ya la habéis visto, y que las aspirinas sus las vais a pagar vosotros". Mientras escuchaba, Carmen Posadas comenzó a preguntarse en qué momento había pasado de ser objeto de la Concejalía de Cultura a la de Asuntos Sociales. "A ver si me van a confundir con esta gente, que yo no soy una asistenta ecuatoriana. Que si no han venido ni Héctor Alterio ni Vargas llosa por algo será. Que miro las fotos de los premiados y no conozco a ninguno. Bueno, sí, a Alaska que también debe haberse creído que esto iba a ser algo serio". Y mientras, el Consejero: "Que yo me apellido Bolivar, que para sudaca yo, que me dan dos rayos de sol y hay que ver lo moreno que me pongo. ¿Falcao no ha venío? A ver si el miércoles gana el Atleti y les dan por el culo a los putos vascos. Un aplauso, ¿no?".

Después el caótico desfile de premiados y finalmente el cóctel. Aparece un camarero con una bandeja de Coronitas y yo me abalanzo como quien encuentra un Oasis en medio del desierto del Gobi. Glu glu glu glu. El Consejero se hace una foto con Alaska y Mario como si fuera una fan loca y luego se hace otra con una gordita llamada Angela Carrasco que, según me cuentan, tuvo un lío con Jesucristo. Carmen Posadas sale pitando atusándose el pelo y, poco después, Alaska y Mario hacen lo mismo. Pero el Consejero no se rinde y continúa haciéndose fotos con cuanta tía se le pone a tiro. "A ver si esta noche mojo", piensa.

Besos.

Beta